Las soletillas son unos pequeños bizcochos esponjosos, con forma ovalada y alargada. Estos suelen prepararse con 3 ingredientes y sus proporciones son de 25 gr de azúcar, 30 gr de harina por cada huevo.
Ingredientes
para 30 unidades
4 huevos a temperatura ambiente
120 gr de harina de repostería
100 gr de azúcar blanquilla
un pellizco de sal
azúcar glas para espolvorear
Preparación
Precalentamos el horno a 180º.
Preparamos dos bandejas de horno forradas con papel de hornear. Debemos asegurarnos que el papel quede fijo en la bandeja para que nos sea más fácil luego hacer tiras, mirar aquí.
Preparamos una manga pastelera con una boquilla de 1cm, de no tener haremos un corte en la punta de la manga pastelera.
Preparamos una manga pastelera con una boquilla de 1cm, de no tener haremos un corte en la punta de la manga pastelera.
Tamizamos la harina de repostería y reservamos.
Tamizamos el azúcar y reservamos.
Separamos las claras de las yemas de huevo.
En un bol ponemos las yemas de huevo junto con dos cucharadas de azúcar y batimos con la ayuda de unas varillas hasta que estén blanquecinas.
En otro bol montamos las claras a punto de nieve, junto con el pellizco de sal, cuando empiecen a tener consistencia iremos añadiendo el resto del azúcar en forma de lluvia, poco a poco, sin dejar de batir hasta conseguir unos picos bien firmes, el merengue tiene que tener una textura espesa y brillante.
Añadimos las yemas y batimos lo justo para que se integren.
Agregamos la harina poco a poco, en tres golpes, mezclamos con la ayuda de una espátula con movimientos envolventes.
Ponemos la mezcla en una manga pastelera, que ya tendremos preparada con una boquilla lisa de 1cm, vamos haciendo tiras de unos 8 cm de largo dejando espacio entre si, ya que cuando las pongamos a hornear la masa crecerá y se expandirá. La boquilla debe apoyarse en el papel para darle la forma característica de la soletilla.
Antes de introducirlas en el horno, con la ayuda de un colador espolvoreamos con azúcar glas. Horneamos a 180º durante 10 o 12 minutos.
Si vuestro horno es muy potente bajar la temperatura a 170º, deben quedar ligeramente doradas y esponjosas.
Si vuestro horno es muy potente bajar la temperatura a 170º, deben quedar ligeramente doradas y esponjosas.
Con la ayuda de una espátula y con cuidado las vamos despegando del papel de hornear y las dejamos enfriar sobre una rejilla.
Gracias por la receta, chicas (es de esas tan sencillas y básicas que a veces no encuentras) Perfectas para un buen tiramisú ;-)
ResponderEliminarPineado y a buen recaudo.
Buen fin de semana