Hongo blanco, seta de calabaza, ceps, sureny... son varios de los nombres que reciben dependiendo del lugar de la geografía española que se encuentre. Una de las setas más sabrosas, por su textura y por su sabor.
Sombrero pardo, con los bordes más claros, muy carnoso, con forma de esfera y aplanándose cuando envejece. De pie blanco cuando es joven, volviéndose amarillento con el tiempo para terminar verdoso.
Antes de consumirla, debemos limpiarla bien con un cepillo o un trapo húmedo, no lavar bajo el grifo, sólo en caso de estar muy sucio. Retiraremos la espuma verdosa que se encuentra debajo del sombrero.
Este hongo se puede consumir crudo, bien fileteado, aliñado con un poco de aceite de oliva virgen extra, sal gorda y unas lascas de parmesano, es un bocado delicioso.
Podemos cocinarlos aportando un intenso a nuestro platos, se pueden saltear en la sartén, añadiendo un poco de aceite de oliva y ajo. Siempre los saltearemos a fuego fuerte para que no pierdan su agua, así no nos quedarán resecos. Combina muy bien con huevo, ya sea a baja temperatura, o en revuelto. Podemos preparar arroces, croquetas, cremas, salsas...
Para conservarlos, podemos deshidratarlos, congelarlos laminados, o en conserva.
Sugerencias de recetas con setas:
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Neus y Sonia, el equipo de Pienso...luego cocino