Col o repollo



Su cultivo data desde el año 2500 a.C, los egipcios ya la consumían y más tarde fueron los griegos y los romanos. Gracias a las relaciones comerciales de los romanos, su cultivo empezó a extenderse por el Mediterráneo.


No fue hasta el siglo XVI, que su cultivo empezó a extenderse hacia el interior de Europa. Durante el siglo XIV las colonias europeas fueron extendiendo su cultivo por el mundo, pero la col se consideraba un alimento para campesinos, las clases sociales altas no la consumían. Actualmente en los países centroeuropeos es un alimento muy consumido y popular.

Actualmente podemos encontrar variedad de repollos, como:

La col lombarda, de color lila intenso, redondeada y de hojas lisas, de sabor dulzón y muy apreciada.

Col blanca o de Milán; conocida también por col Savoy o col rizada. Sus hojas son rizadas y algo azuladas. Y sabor fuerte.

La col verde, la más en común,  sus hojas exteriores son de un verde claro, mientras las del interior son blancas.

Su mejor época de consumo va des de los meses de septiembre a enero.

Encontramos un alto contenido de vitamina C y E. Es rica en potasio, calcio y magnesio.

Cuando compremos col, nos aseguraremos de que este firme, dura y compacta. Rechazaremos las de peso ligero y hojas marchitas o con manchas. Si la compramos partida, asegurarnos que el centro es compacto y blanco.

Una vez en casa se conserva muy bien en frigorífico, dentro de una bolsa perforada. Pero lo hemos de mantener aislado del resto de alimentos, para evitar que transmita su olor. Si esta partida el olor se intensificara. No guardar lavado.

El olor que desprende al cocinarlo es por su alto contenido en azufre.

Cuando vayamos a cocinarlo, quitaremos las hojas externas, lo cortaremos por la mitad y eliminaremos en tronco central. El resto lo dejaremos en remojo unos minutos, con un chorrito de vinagre o unas gotas de limón y sal para eliminar impurezas e insectos que pueda contener. Recordar que no sobrepasaremos el tiempo en remojo, por que como toda verdura y hortaliza pierde sus vitaminas.

Se puede comer en crudo, en ensaladas, si se cocinan en exceso y con mucha agua, se producen los olores desagradables, perderá su color y sus vitaminas. Sabremos cuando esta cocida, por que empieza a encogerse. Para evitarlo introduciremos la col cuando el agua este hirviendo.

Sugerencias de recetas con col:

3 comentarios:

  1. Gracias por compartir la información.Recibe un cordial saludo

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  2. Aquí lo llamamos repollo. Este año he plantado y no se ha perdido ni uno. Y dentro de nada toca volver a plantar.
    Besinos

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  3. Belén, cómo lo cocinas? Me encantaría encontrar una receta con repollo donde de verdad me guste. No se si es su fuerte olor al cocinarlo o que, pero no termina de gustarme demasiado.

    Saludos

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Neus y Sonia, el equipo de Pienso...luego cocino